8M, la marcha que sí visibiliza a las mujeres

Por Viridiana Lazarini

El movimiento feminista ha tomado fuerza en, al menos, los últimos tres años. Cada vez somos más las mujeres que tomamos conciencia sobre el verdadero papel que tenemos en la sociedad y dejamos de lado el rol que se nos ha impuesto por siglos —me atrevería a decir—.

La marcha del 8 de marzo fue un espacio en el que las mujeres salimos a exigir respeto por quien somos. La voz es el instrumento más poderoso que tenemos los seres humanos, y es por ello que debe ser usada para gritar que pare la violencia de género, que se respete nuestro cuerpo, nuestras decisiones.

¿Alzar la voz, reclamar, va a cambiar algo? Posiblemente no. El cambio no se logra en un día. Aunque sin duda, este tipo de manifestaciones sí logran visibilizar una situación.

¿De qué situación hablamos? De que hoy en México 9 mujeres son asesinadas al día. De que en pleno 2019 mujeres mueren al practicarse un aborto clandestino. De que aún existe un alto grado de sexismo en todos los ámbitos de la sociedad, y por ello las mujeres tenemos menos oportunidades laborales que los hombres. De que la violencia de género sigue matando mujeres. De que aún se condena a las mujeres que deciden sobre su cuerpo, al optar por un aborto. Durante la marcha hubo consignas que exponían todos estos puntos y más.

Lo gratificante de que suceda un evento como éste, es ser testigo de que el cambio sí se está gestando. Tal vez vendrá lento, pero llegará. Cada vez somos más las mujeres que exigimos una vida sin violencia. Sin duda, el feminismo ha servido para fortalecer el espíritu de las mujeres, y esto es lo que pondrá fin —algún día— al sistema opresor que nos ha mantenido por debajo de cualquier privilegio que pueda tener un hombre. Algún día.